Sunday, August 19, 2007

LA MEDITACION DE LA RISA

La risa lleva un poco de energía desde tu fuente interna a tu superficie. La energía empieza a fluir, sigue a la risa como una sombra, ¿te diste cuenta? Cuando te reís realmente, por un rato, estás en un profundo estado meditativo…se detiene el pensar. Es imposible reír y pensar a la vez; son diametralmente opuestos: o te reís, o pensás. Si te reís realmente, dejás de pensar, si todavía estás pensando, la risa va a ser a medias, va a quedar rezagada…va a ser una risa mutilada.
Cuando te reís de verdad, de pronto desaparece la mente…según mi experiencia, el baile y la risa son las mejores puertas, las más naturales y las más accesibles. Si bailás realmente, se detiene el pensar; seguís y seguís, das vueltas y vueltas, y te convertís en un remolino -se pierden todos los límites, todas las divisiones; ni siquiera sabés donde termina tu cuerpo y donde empieza la existencia…te disolvés en la existencia y la existencia se disuelve en vos, se trascienden los límites. Y si estás bailando de verdad -no dirigiéndolo vos, sino dejando que te dirija, dejando que te posea-, si te posee el baile, dejás de pensar…
Lo mismo pasa con la risa. Si te posee la risa, se detiene el pensar.
La risa puede ser una bella introducción a un estado de no pensar…